Los encantos de Nora

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Nora Morales Fortuño y su hermano Juan Morales Fortuño, junto a Luis Muñoz Marín e Inés Mendoza en la inauguración de una cooperativa en Puerto Rico (circa 1957)

Andrés Fortuño Ramírez

Esta foto es cortesía de Carmen Morales, nieta de Inés Fortuño Sellés. En la foto aparece su papá, Juan Morales Fortuño «Jean», con chaqueta y lazo, junto a su hermana menor, Nora Morales Fortuño (extrema derecha) quien trabajó en la Fortaleza de 1955 a 1961, durante la gobernación de Luis Muñoz Marín.

En la misma fila aparecen sentados a extrema izquierda, doña Inés Mendoza, volteándose hacia atrás, junto a su esposo Luis Muñoz Marín, primer gobernador electo por el pueblo en Puerto Rico. La foto se tomó a finales de la década del cincuenta en la inauguración de una cooperativa. Juan Morales Fortuño fue un pionero y gran pilar del movimiento cooperativista en Puerto Rico.

A juzgar por lo guapa que aparece Nora, estamos casi seguros de que Luis Muñoz Marín aprovechó que doña Inés estaba distraída, para voltearse y mirar a Nora. De seguro pensó: “wow, qué guapas son las mujeres Fortuño”…je, je y es que con un botón basta.

Aún tenemos dudas sobre quién es la señora sentada entre Juan y Muñoz Marín. Imaginamos alguien relacionado al gobierno o al sistema de cooperativas. Cualquier información que puedan aportar será agradecida.

La reivindicación de Socorro y los 100 del Vanderbilt

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Fotografía de Socorro Ramírez de Fortuño en el hotel Condado Vanderbilt 1922. Al lado, la página del libro en que aparece esta foto. Abajo, el libro, y una fotografía de Rafael Fortuño Sellés, esposo de Socorro.

Andrés Fortuño Ramírez

El 15 de agosto de 2019, el hotel Condado Vanderbilt en Puerto Rico lanzó un libro en celebración de sus cien años de existencia. Entre las páginas del libro, aparece una fotografía tomada en 1922 de Socorro Ramírez de Fortuño Sellés, mi abuela paterna, posando frente al hotel. Al lado de la foto aparece un texto con información sobre mi abuela en esos tiempos. Su presencia en este libro ha servido para documentar detalles de la época en que se inauguró el hotel, y de paso, rescatar el verdadero apellido de mi abuela.

Cuando mis hermanos y yo éramos pequeños, mi abuela de vez en cuando nos recordaba que su apellido no era Ramírez, sino Ramírez de Arellano. Seguido nos contaba que su abuelo había inscrito a su padre, y su padre a ella, solo con el Ramírez, pues encontraba engorroso e innecesario eso de cargar con tanto apellido.

Para los tres hijos de Socorro, o sea, mi padre y sus dos hermanos, este asunto de los apellidos era un asunto sin importancia o como decían ellos, “meras parejerías”.  Así que los nietos crecimos sin prestarle mucha atención a los reclamos de mi abuela sobre su ascendencia.  

Curiosamente, en esos tiempos, una hermana de mi abuela llamada Nicacia Estrella, se reunía a menudo con Lorencita Ramírez de Arellano, la esposa del ex gobernador de Puerto Rico, Luis A. Ferré, y entre ellas se llamaban primas. Lo que hasta cierto punto confirmaba lo que nos decía mi abuela. Sin embargo, no fue hasta hace poco que me enteré de toda la verdad.

Mi curiosidad por saber más sobre mi ascendencia y genealogía, me llevó a subir una fotografía de mis abuelos paternos y maternos en una página dedicada a este tema en Facebook. Inmediatamente, un experto en estos temas llamado Elías, me contactó, dejándome saber que había una página sobre los Ramírez de Arellano que de seguro me interesaría.  Bajo el mismo post le comenté, que mi abuela siempre nos había dicho que ese era su apellido, pero que fuera de sus historias no lo había confirmado.

Fue entonces cuando me dijo, “te comento sobre la página, pues a mí me consta que ese es su apellido” y me envió una copia del árbol genealógico de mi abuela en varios sitos de la Internet, donde aparecen mencionados muchos de sus antepasados con el apellido completo, entre estos, el tatarabuelo de Socorro, Fernando Ramírez de Arellano y su tras-tatarabuelo, Estevan Ramírez de Arellano. Ambos de San Germán. 

Ese mismo día comencé a hacer otras búsquedas y a conectarme con expertos en el tema. Entre estos Debra, la administradora de la página, Genealogía de las Familias Ramírez de Arellano en Facebook. A través de estos no solo confirmé la ascendencia de mi abuela Socorro, pero me enteré de que mi abuela paterna y mi abuelo materno, Andrés Ramírez, provienen de la misma cepa de Ramírez de Arellano y son primos quintos. También que Socorro, Estrella y Andrés, son todos primos quintos de Lorencita Ramírez de Arellano.

Cuando obtuve toda esta información, mi abuela había muerto hace años, entonces no pude contarle y reivindicarla, tras años de no darle importancia a sus historias. Igual le dejé saber a mis padres, hermanos, tíos y primos, que mama Socorro estaba en lo correcto. No que el descubrimiento cambiara nada, pues al final, este apellido era común en el oeste de Puerto Rico y no siempre venía atado a una gran herencia monetaria como muchos piensan. Pero al menos algo nos quedó claro, que Socorro estaba en lo cierto, su apellido era Ramírez de Arellano.

Mi abuela me regaló esta fotografía frente al Vanderbilt pocos años antes de morir. Mis hermanos y yo, sabíamos dónde se había tomado pues conocemos bien esta playa en el Condado. Pero no fue hasta que mi hermana Milily encontró una antigua postal del hotel en la Internet, y colocó la foto de Socorro sobre la postal, que conseguimos un pareo exacto. La foto fue tomada en la parte de atrás del hotel, donde aún sobresalen las formaciones de coral sobre las que mi abuela aparece sentada. Nosotros le llamamos a estas piedras, los corales de Socorro.

Emocionado con el hallazgo, subí la fotografía en Facebook. Por alguna razón, esta llegó a ojos de personas relacionadas al hotel Condado Vanderbilt, quienes me contactaron y me pidieron permiso para usarla en el libro de los cien años, junto a alguna información que pudiera proveerles. Fue entonces que se me ocurrió redimir a mi abuela y presentarla en libro con su nombre completo, Socorro Ramírez de Arellano.

Cada vez que veo la fotografía pienso en cuantas cosas quisiera poder preguntarle. Por ejemplo, quién la retrató, a qué fiesta asistía, con quién se encontraría ese día y cómo era la vida en Puerto Rico en esa época. Tantas historias que habrán desaparecido con ella, secretos que solo podemos imaginar a través de su misteriosa mirada aún plasmada en esta fotografía.

En este antiguo documento de San Germán, Puerto Rico, de 1767, se menciona el casamiento de Fernando Ramírez de Arellano y Juana Leocadia Pérez de la Seda, tatarabuelos de Socorro Ramírez, y a sus padres, Estevan Ramírez de Arellano y María de Toro, tras-tatarabuelos paternos de Socorro. El hermano de Estevan, Andrés Ramírez de Arellano, fue el tras-tatarabuelo paterno de mi abuelo materno, Andrés Ramírez.

NOTA: El histórico hotel Condado Vanderbilt fue construido por Frederick William Vanderbilt y diseñado por la firma Warren & Whitmore, diseñadores del Grand Central Station en NYC. Entre sus primeros huéspedes estuvieron Charles Lindberg, Franklin y su esposa Eleanor Roosevelt, Errol Flynn y Carlos Gardel. El hotel hoy forma parte de los Hoteles Históricos de America.